Un cambio total.
Esto es lo que se adivina de las palabras de Pablo Alborán, quien después de tres
intensos años de discos, éxitos, premios y viajes, desea encerrarse en el estudio para hacer un trabajo mucho más libre, con canciones más puras y que conecten más con él.
Mientras se
encontraba en México, a donde viajó para promocionar la reedición de Tanto y ofrecer dos conciertos en el
Lunario del Auditorio Nacional, el cantante y compositor malagueño
adelantó que se tomará un breve descanso y que en febrero se dedicará de lleno
a su nuevo álbum.